✦ Desde lo invisible hacia la luz ✦

Me llamo Daniela, y vine a este mundo a creer en lo que no se ve con los ojos físicos.

Desde muy joven sentí que mi alma recordaba algo más…

A los 18 años, el Tarot llegó a mí de forma mágica y silenciosa.

Mi primer mazo no fue tradicional: compre un libro

y lo recorté con mis propias manos. Así empezó mi conexión con el misterio.

Leía de manera intuitiva, anotando cada lectura, cada mensaje, cada sensación.

Y el universo empezó a responder:

personas que ni siquiera me conocían comenzaron a regalarme libros sobre Tarot.

Uno de ellos me lo mandó la compañera de trabajo de mi hermano,

y aún lo conservo como un tesoro.

Con el tiempo, mi mamá me regaló un Tarot de Marsella.

Y con él, llegó mi primera maestra.

Durante años leí sólo los Arcanos Mayores,

respetando su energía, su voz y su sabiduría.

Entonces supe que no era un pasatiempo: era un llamado del alma.

Así nació Alma Gitana Mora,

mi espacio sagrado de conexión, servicio y magia.

Pero el camino no terminó ahí…

Mi despertar siguió expandiéndose.

Los Registros Akáshicos aparecieron como un puente hacia otras dimensiones.

A través de ellos empecé a canalizar mensajes, a recordar vidas pasadas

y a comprender que el alma guarda secretos que el cuerpo no siempre puede contar.

Las terapias regresivas me llevaron a sanar heridas antiguas,

a abrazar a la niña, la madre, la bruja, la mujer de otras vidas.

Las memorias se abrieron para traer luz al presente.

Los rituales se volvieron medicina,

y las Runas, un lenguaje sagrado que reconocí como propio,

aunque nunca antes las hubiera estudiado.

Cada herramienta llegó para ayudarme a sanar,

a volver a mi centro, a recordar quién soy.

Y solo entonces, supe que estaba lista para entregar todo lo aprendido con amor.

Hoy, guío, acompaño y canalizo.

A través del tarot, las runas, los registros, los rituales y la memoria del alma.